sábado, 4 de septiembre de 2010

Descansando en tu alma



En ti mi miedo se hace leve, desbarata mis barreras la codicia de tu huella, transcurre mi bailar al son de tu tambora, desbordando con tu anhelo las caricias en mi aurora, te conozco, no hay penumbra en el elíxir de tu estrella.


En ti descansa el sol de mi sonrisa, pausada como viento de un febrero, cosechando ternuras de verdes esperanzas, aligerando mis pasos de bohemio a las cenizas, te despierto, vives levitando entre un te quiero y no te quiero.

En ti reposan mis ansias conocidas y pernocto en paraísos de John Milton, disfruto extasiada de una débil lejanía, el morbo se libera y te busca en otras vidas, te presiento, mis pechos se endurecen a la espera de tu instinto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario